miércoles, marzo 01, 2006

El cañón de la pistola

Cuando Mao, el Gran Timonel, dijo aquello de que “el poder nace del cañón de una pistola”, estaba enunciando una ley de validez universal. Siempre hay, siempre habrá, el cañón de una pistola oculto tras todas las leyes, reglamentos, acuerdos políticos y decisiones del Gobierno. Sí, también detrás de la sonrisa y el talante. No es probable que la gente obedeciese todas las leyes si no hubiera coacción más allá de los eslóganes, las buenas palabras y los consensos.

Pero todo lo que legítimamente podemos llamar progreso en política ha ido encaminado a garantizar que la fuerza es el último recurso, no la única base, ni siquiera la principal. Lo que nos repugna de las dictaduras no es que impidan la libertad personal, que bien podría no ser el caso; ni que, a diferencia de las democracias, recurran a la fuerza para gobernar, sino que ese recurso aparezca descarnado, desnudo, como única fuente de legitimidad. Que se vea en primer plano el cañón de la pistola.

Existe en España, surgido en el País Vasco, un grupo que reivindica la independencia de una nación que no ha existido jamás salvo en la febril imaginación de un frustrado ex carlista decimonónico. Se llaman a sí mismos ‘gudaris’, soldados, y aunque se dicen representantes de la voluntad de su nación imaginaria, no ponen su confianza en los votos, sino en el cañón de la pistola. Nadie los ha elegido, ni se les teme por lo que representan; se les tiene el miedo elemental que provoca una pistola encañonada e imponen su voluntad mediante tiros en la nuca. Es impresionante lo que esa amenaza, esa perpetua espada de Damocles colgando sobre todo un pueblo, puede lograr. Dense una vuelta por los feudos abertzales del País Vasco, verdaderas ciudades sin ley del Salvaje Oeste dominadas por los cuatreros, a la espera de los Siete Magníficos. Es el imperio del miedo.

Y ver ahora al sherif -la legitimidad, el Estado de Derecho- negociando con los etarras devuelve al primer plano -obsceno, desnudo, evidente- el cañón de las pistola.